Ya creas que puedes o que no puedes, en ambas cosas tienes razón.

Como crear nuestro Círculo Mágico

El circulo mágico es como una esfera energética invisible que retiene lo que nosotros evocamos, impidiendo que dicha energía se disperse. Es un lugar de protección que para "las brujas" representa un verdadero templo, resguardado de toda negatividad, en el que nos ponemos en contacto con el universo y lanzamos nuestro mensaje o petición. Trazar el círculo tiene como fin impedir que la energía que invoquemos, creemos y utilicemos con fines mágicos, no se disperse en el entorno circundante y así poder concentrar dicha energía en nuestro propósito.

Trazar un circulo es muy sencillo, se puede crear con:

• Una varita mágica.
• Con la daga ceremonial (El Athame)
• Con una punta de cristal de cuarzo: rutilado, ahumado, rosa...
• con un dedo de la la mano...
  

  "Yo utilizo mi dedo índice derecho y refuerzo la creación del círculo colocándome en el mismo un anillo con una Amatista limpia y cargada"

Una manera mas ceremonial y simbólica de crear el Círculo, y que me ha sido transmitida por la tradición Wicca es la siguiente:

-Creación del Circulo-

Con la ayuda de una brújula (si es necesario) identificar los cuatro puntos cardinales...
En cada uno de los cuatro puntos se coloca una vela, cada una representa a ese punto, que a su vez también representa a cuatro de los cinco elementos sagrados...

• Este - (vela) Amarilla - Aire
• Sur - (vela) Roja - Fuego
• Oeste - (vela) Azul - Agua
• Norte - (vela) Verde - Tierra (y una quinta)
• (vela) Púrpura - para el quinto elemento mágico - Espíritu.

Nos concentramos, relajamos nuestro cuerpo y visualizamos como la energía entra en nosotros a través de los pies, sintiendo como atraviesa el tronco, los brazos y se proyecta en nuestro dedo índice o en la punta de la varita.

Es conveniente que finalizada esta parte digamos unas palabras, una declaración o afirmación para reforzar la creación del Círculo.

"Mas adelante os contaré alguna de las técnicas mas efectivas que suelo utilizar sobre concentración y visualización"

"En la vida como en la brujería las afirmaciones realizadas tanto de persona a persona como en soledad tienen un gran poder"

Una vez hallamos pronunciado nuestra declaración pasaremos finalmente a invocar y saludar (también con nuestras palabras) a los cinco elementos. Comenzando por el Este, en el sentido de las agujas del reloj (deosil) y terminando en el centro del Círculo con el elemento del Espíritu.
Echo esto podremos proceder con la realización de nuestros hechizos y conjuros.

Para ti Suerte, Amor, Salud... Que así sea ahora y siempre!

Cuando el poder del amor prevalezca sobre el amor al poder... el mundo conocerá la Paz.

Principios, ética y actitud.

Tomemos la magia e imaginemos una red, una conexión en la que todos nos encontramos conectados como hilos invisibles que a su vez conforman una serie redes. Dichas redes se conectan entre si y crean un patrón universal que describe toda la vida, una inmensa red sumamente delicada, asta tal punto... que un acontecimiento que afecte a una de sus partes repercutirá en todo, pues la materia de la cual se compone es el Espíritu, o Quinto Elemento.

Cuando trabajamos con rituales o practicamos la hechicería, creamos nuevos patrones en esta gran red de espíritu. Antes de practicar cualquier tipo de magia hemos de formularnos una serie de cuestiones para asegurarnos que se respetará el bien estar de toda la red... y no solo la parte que habitamos.

Algunas preguntas que debemos formularnos antes de practicar un hechizo...

-Pensad si realmente necesitáis un conjuro, los problemas requieren un esfuerzo para ser resueltos.
-No generéis falsas ilusiones ni a los demás ni a vosotros mismos.
-¿Realmente necesito un conjuro?
-¿Que me hace falta de verdad?
-¿Como repercutirá en mi la "Ley del triple retorno"?

Por último, a modo de ejemplo, sabed que no es posible cambiar el libre albedrío de otra persona mediante la magia, por lo que nadie debería aspirar a conseguir dichos fines y utilizar la magia con objetivos egoístas.

En resumen, la ética de la magia es de naturaleza práctica y se basa en gran medida en el sentido común. Si entras en el circulo mágico manifestando una actitud de respeto hacia los demás y hacia ti mismo alcanzarás el éxito en tu cometido y la experiencia será gratamente enriquecedora.